El verdadero perdón del que nos habla Un curso de Milagros es el que se origina en la mente y la sana. Es el más elevado medio de aprendizaje que nuestra Sabiduría, nuestro maestro interior, nuestro Dios (o como queramos llamarlo), pone a nuestra disposición para poder llevar a cabo un verdadero cambio en nuestra manera de sentir y pensar. No conlleva ninguna pérdida, sino a la sanación.
El verdadero perdón es distinto al que conocemos del mundo, este elimina la culpa; el otro la asigna y reparte.
¿Qué origina el perdón del mundo?
El perdón del mundo crea separación. Desde el sistema de pensamiento de la separación tenemos la culpa, el castigo y el miedo. En este sistema, el perdón que manejamos es el del mundo: «Te perdono, me sacrifico, soy bueno…» Ese “te perdono” puede ser dicho desde dos lugares: desde el lugar de la victimización o desde “te perdono porque me has ayudado a crecer a sanar mis limites”.
Si miro algo y no me da paz es porque estoy viendo desde la mirada equivocada, desde el sistema de la separación, desde el miedo, la culpa. Un límite es una idea equivocada en la mente.
La mirada que nos ayuda a sanar
Cuando damos el paso a mirar desde el sistema de la UNIDAD nos encontramos con el verdadero perdón, el que se origina en la mente y la sana. Desde el lugar de la unidad se ve a los que nos rodean y al mundo como nuestros salvadores, esos que nos ayudan a sanar los juicios que hemos hecho sobre nosotros mismos.
Si estamos viviendo una experiencia es porque la hemos proyectado. Tratamos de ir fuera a cambiar cosas, pero el verdadero perdón está en nuestra mente sabía que está unida a nosotros, con nuestro maestro interior. Esa mirada nos ayuda a sanar, muestra el poder. Si sentimos limitación con cualquier cosa, el perdón lo deshace.
El verdadero perdón nos permite ver que el pasado ya pasó, que el presente es el perdón. Nos libera realmente del tiempo. Cuando el perdón empieza a limpiar es como si se nos abrirá una ventana mental, enseguida viene nuestra mente, nos limpia y entonces, el efecto en el mundo sucede, se ven los resultados.
El verdadero perdón es esa unión con mi auténtica sabiduría.
Este perdón es una herramienta que nos lleva a la causa, a la mente; vemos el mundo como sanadores que nos ayudan y el milagro sucede cuando nos liberamos. Cuando permitimos cualquier resultado y no nos juzgamos, simplemente permitimos, no hay juicio, no hay idea de culpa, no hay consecuencia de castigo, hay paz.
Mientras que la permisión elimina el juicio, el verdadero perdón deshace la culpa. Para poder adentrarnos en el verdadero perdón, que es la llave de una mente libre, es importante conocer, abrir nuestra mente y aprender. Cuando recibimos una ofensa el perdón lo deshace, aparece el amor en lugar del odio. Muchas veces buscamos algo rápido, pero esto ocurre realmente cuando soltamos, paso a paso, tomamos consciencia de ello y dejamos volar.
El perdón, verdaderamente concedido, es el camino en el que se encuentra tu única esperanza de libertad
UCDM
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